
Con su característico estilo callejero, sabor narrativo y sonoridad de vieja escuela, Harold Aguirre “El Poeta del Barrio” regresa con el sabroso sencillo “Mango Viche”, una pieza que reafirma su lugar como uno de los cronistas urbanos más auténticos de la salsa contemporánea. Fiel a su apodo, Aguirre convierte lo cotidiano en poesía y lo transforma en ritmo, haciendo que cada verso pique como el mango biche con sal y limón: ácido, sabroso y provocador. Esta entrega, Aguirre nos lleva a las esquinas del barrio, donde el mango viche no es solo fruta, sino metáfora: de deseo, de picardía, de infancia, de barrio y de calle. El arreglo musical, nuevamente bajo la batuta del multifacético Julio Cortés, es un despliegue de sabor tradicional con tintes modernos. Desde el tumbao del piano hasta el retumbar de los metales, todo está diseñado para que el tema camine con soltura entre la nostalgia del son y la vitalidad de la salsa brava.
La ejecución instrumental es impecable, con músicos de alto calibre que ya acompañaron a Aguirre en temas anteriores como «El Poder del Guaguancó»: Silvio Ferrín en el baby bass marca una base sólida y sabrosa, Carlos Zapata con sus trompetas añade brillo y fuerza, José Miguel Quintero “Cachetes” vuelve a destacar con un solo de trombón lleno de sabor callejero, Diego Murillo en el saxo barítono aporta cuerpo y profundidad, y por supuesto, los coros entre Aguirre y Cortés redondean la propuesta con el sello clásico del soneo inteligente y contestatario.