Los inicios musicales de Pepe Montes están marcados por un profundo legado familiar y un contexto histórico significativo. Fue en 1994, durante el inicio del «período especial» en Cuba, un momento de gran escasez para el pueblo cubano, cuando Pepe recibió su primer piano, un regalo de su padre y su abuela Yiya, quienes utilizaron sus ahorros para apoyarlo en su pasión. Este piano se convirtió en la semilla de su carrera, permitiéndole explorar y desarrollar el nuevo sonido conocido hoy en día como Timba.
Pepe comenzó su travesía musical en la agrupación de su escuela, Son Caliente, donde sus primeros pasos le permitieron entender y experimentar con el vibrante ritmo de la música cubana. Su talento y dedicación lo llevaron rápidamente a unirse al Grupo Condado de Santa Clara, marcando el inicio de su carrera profesional. Sin embargo, fue a los 18 años cuando su trayectoria dio un salto significativo al comenzar a tocar con Paulito FG, uno de los nombres más destacados de la música cubana.
Desde muy joven, Pepe estuvo inmerso en el ambiente musical de La Habana, timbeando y aprendiendo de los grandes músicos que lo rodeaban. Un momento transformador en su vida fue en mayo de 1994, cuando tuvo la oportunidad de cantar junto a NG La Banda, interpretando el número «Échale limón». Con solo 7 años, esta experiencia en vivo en Santa Clara no solo fue un hito personal, sino también un evento que solidificó su pasión por la música y le mostró el poder transformador del arte.
La historia de Pepe Montes es un testimonio del poder de la música para trascender las dificultades y crear conexiones profundas. Su carrera, iniciada en tiempos de adversidad, se ha forjado con talento, perseverancia y un amor inquebrantable por la música cubana, haciendo de él una figura emblemática en el panorama musical de su país.
Temas: 1. Sobre Sentimiento; 2. Guantanamera; 3. Cortadito 23; 4. Sway; 5. Obsesión; 6. Chan Chan; 7. Made For Each Other; 8. Quien Sera; 9. Adios; 10. Tropico.