Ensamblado y dirigido por el vocalista cubano José «Pepito» Gómez, la Orquesta Akokán es un gran colectivo de la banda de los mejores músicos cubanos, jóvenes y viejos. Su próximo álbum en Daptone presenta música completamente original y fue grabado en vivo para grabar durante una sesión de tres días en los sagrados estudios estaduales de La Habana, Havana.

Escuchando el nuevo LP de la Orquesta Akokán, no puedes evitar sentir los espíritus de los gigantes musicales de Cuba irradiando de los altavoces. Pero honrar y cuidar a estos espíritus no es tarea fácil, ni es una tarea que le quede solo a una generación. Es una colaboración de jóvenes y mayores; Los ancianos conocen las tradiciones, los gestos, los conjuros, pero es la generación más joven la que tiene el deber de aprender, la fuerza para continuar y el fuego y el alma para hacer nuevas canciones para los espíritus nuevos.

En noviembre de 2016, Michael Eckroth viajó a los sagrados estudios Areito en Centro Habana con una pila de cuadros debajo del brazo. Al llegar a la cavernosa sala de estar con paneles de madera, hizo un inventario de los jugadores reunidos por el productor Jacob Plasse: una docena de jugadores de viento y ritmo más feroces y rítmicos de Cuba de grupos como Irakere y Los Van Van, el sensacional vocalista veterano. José «Pepito» Gómez, y un puñado de jóvenes experimentados de la música latina de Nueva York. Estos músicos transformarían sus tablas en el documento vivo y respirador que tienes en tus manos.

Un arpegio desciende dulcemente por las teclas del piano, y el conjunto explota en masa con exclamaciones de trompetas, introduciendo saxofones que de inmediato se establecen como el centro de una sección rítmica. Los arreglos llevan la belleza exquisita, el patetismo y la alegría de las reconocidas orquestas de baile de los años 1940 y 1950 que habían grabado en esta habitación, evocando los fantasmas de Arsenio Rodríguez, Pérez Prado y Beny Moré. Y las robustas y comprobadas arquitecturas musicales de son cubano y mambo están presentes y se honran hábilmente a través de las nueve composiciones originales. El tres cubano melodioso, el tumbao oscilante de las congas, la mezcla tensa de armonías vocales: están todas allí. Sin embargo, hay algo inequívocamente nuevo: secciones de saxofón tocando montunos donde se podría imaginar un piano, un angelical, swinging flauta que cabría esperar en una grabación de charanga, sones – improvisaciones vocales que tienen el flujo experimentado y la cadencia de mediados de 1970 cantantes de «salsa dura», y por supuesto, la aparición del inimitable César «Pupy» Pedroso en el piano. De alguna manera, esta síntesis de gramática musical y estilos compositivos, de La Habana y Nueva York, de viejos y nuevos, tiene perfecto sentido. Akokán es una palabra yoruba utilizada por los cubanos para significar «desde el corazón» o «alma», por lo que no sorprende que una grabación como esta encuentre su camino de regreso a Daptone Records de Brooklyn. Durante casi una generación, la etiqueta venerable nos ha traído música conmovedora en una miríada de estilos, hechos en el presente, pero con todo el arte y el sabor de las grabaciones clásicas del pasado. Al hacerlo, Daptone ha consagrado tanto los géneros que honra como a los artistas que crean nuevas obras en el canon universal de la música dance. Es una cocina perfecta para servir a este cautivador baile entre lo viejo y lo nuevo: una sopa levantamuertos, preparada con ritmo, con cuidado y, sobre todo, con akokán.

orquestaakokan.com

Temas: Mambo Rapidito; La Corbata Barata; Un Tabaco para Elegua; Otro Nivel; La Cosa; Cuidado Con el Tumbador; Yo Soy para Tí; No Te Hagas; A Gozar la Vida.